viernes, 14 de junio de 2013

Palpable

Hemos ido dejando de lado recursos imprescindibles.
No habrá forma de recuperarlos.

Hemos colaborado a que el desolado paisaje nos escupa seca esperanza.
Hemos batido ponzoña y creído que no nos afecta.
Hemos sido artífices del seco futuro que nos alcanza.
Hemos hecho esas cosas, inconscientes y perversos, sin tomarlas en serio.

Con arrogancia creemos que lo alcanzado estaba, sin tener en cuenta que debíamos: preservarlo, protegerlo, repararlo, restablecerlo,...

Sabíamos cosas que de nada nos valen.
Un saber ajeno que alimentaba sus procesos, dejando en descuido los nuestros.

Hemos caído al pozo profundo en que el barro y cieno solidifican en plomada.

¿Aguantaremos?
¿Remontaremos?
¿Saldremos de ésta?

Aún los creemos. Damos crédito a palabras de mentirosos, que nos las tiran a la cara.

¿Es cobardía?
¿Es abulia?

Es dejadez de no saber ser.

Acomodados, vemos cataclismos bajo nuestros pies, cuando el hecho es que estamos en ellos, sin distancia. Sin parapetos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario